Lo primero de todo es agradeceros a todos este fin de semana tan completo que hemos tenido juntos, José Luis, Víctor y Rober por la historia que han montado, a nuestro cámara Emilio, que los más prestigiosos directores de Hollywood quisieran tener, a las dos peques por darnos esa toma fantástica que estamos deseosos de volver a ver, a la empresa GRUPO FORJA por dejarnos unas instalaciones de ensueño y sobre todo porque nos mostro que hay gente que se preocupa por crear un ambiente de trabajo estupendo para disfrutar trabajando, y no me puedo olvidar de los pedazo de actores y actrices que no tienen desperdicio alguno .
A través de esta nueva experiencia outdoor creo que hemos potenciado dos aspectos súper importantes en el mundo actual y que son el TRABAJO EN EQUIPO y el LENGUAJE NO VERBAL.
Os extrañareis que diga lenguaje no verbal si es un corto de cine, “este tío está loco por lo menos”, pero si me permitís expondré mi punto de vista en este aspecto, en cada escena el equipo de producción y rodaje nos hacia repetir y repetir los gestos, miradas, movimientos etc. Sin llegar a darnos cuentas aprendimos o observamos cómo es una reunión donde todos se gritan, como hablan los gestos de cada persona o como expresar algunos sentimientos que vivimos en la empresa cada día “tensión, miedo, estrés e incluso pánico”, por ejemplo ante la figura de un “jefe toxico” que por desgracia actualmente muchos directivos continúan aferrándose a esta figura actualmente.
El trabajo en equipo se potencia nada más que por rodar y hacer las escenas, pero hay un punto que destacaría en esta fantástica actividad del máster y es la presión del tiempo, el rodaje estaba cerrado con unos horarios muy estrictos, viernes de de cuatro a ocho de la tarde y el sábado de nueve a quince, lo que creo una cooperación y una ilusión por hacer un buen trabajo que no por desgracia no se ve muy a menudo en el mundo empresarial
Aparte de potenciar estos dos puntos clave en la gestión del talento de un grupo de personas, hay una parte que nos une y nos crea ese sentimiento GESTA que vamos abrazando cada día. Con cada talento que vamos encontrándonos en esta senda del conocimiento, como pequeñas paradas debajo de unos árboles que con sus sombras, basadas en el conocimiento y la experiencia nos van mostrando un mundo de sentimientos, trabajo e ingenio para darnos una semillita de cada uno de ellos y cuando seamos mayores podamos tener un bosque bien denso lleno de muchos árboles con los que hemos pasados ratos sensacionales a lo largo del trayecto o como me gusta más verlo la senda del talento